
Por Alexandre Roig
Presidente del INAES
Es impactante la forma de reacción espasmódica de una candidata a vicepresidenta como Victoria Villarruel, que ve una imagen y produce alteración, que claramente conecta con un enojo visceral y que expresa un profundo desconocimiento. Estamos en un momento en el cual no es cuestión de menospreciar, sino de abrir algunos debates; en particular, en relación con lo real. El fenómeno que estamos viendo, de auge de un tipo de voto de extrema derecha, expresa en el fondo una crisis de cierta relación con lo real; de saber qué es real y qué no es real.
Ya no es un problema de una opinión política -todo es respetable mientras se respete la integridad del otro-, sino que tiene que ver con un desconocimiento de lo real. Entonces, me parece que el punto clave es, tanto con el cooperativismo como con cualquier realidad de la sociedad argentina, que podamos tener dirigentes o candidatos que conecten, que conozcan, que respeten la realidad del país.
Estas reacciones espasmódicas desconocen la realidad de nuestro pueblo. Resultan tanto más preocupante que no se respete a los valores que hay en muchas de nuestras juventudes, que son muy importantes y que los jóvenes todo el tiempo reivindican, que están relacionados a la aceptación del otro. Estos valores tienen que ver con cierta solidaridad, cierto afecto, cierta forma de construir nueva familia; un respeto que ha ido creciendo generación a generación y que conecta con esa tradición cooperativista que tiene la Argentina.
En su reacción espasmódica y visceral, Villarruel no contempló nada de esto. Solo se limitó a reaccionar desde el enojo y el desconocimiento, tanto hacia la comunidad LGBT como hacia la Economía Social y Solidaria.
Recordemos que la Argentina es uno de los países con mayor tradición cooperativa y mutual del mundo y esa tradición ha performado gran parte de nuestra cultura y de la constitución de nuestra Nación. Invitamos a pensar juntos lo real, lo que existe, lo que nos hizo bien y lo que nos hace bien, y cómo es bueno cuidarlo y hacerlo crecer.