(Ansol).- Los ocho empleados de la pizzería Mi Tío están en guardia permanente  tras el intento de vaciamiento del local gastronómico, esperando que los patrones se presentes y paguen los sueldos adeudados y propongan un proyecto de continuidad laboral, mientras ya han sido notificados de la primera reunión en Ministerio de Trabajo.

“No dieron ninguna respuesta. Por eso estamos permaneciendo aquí, para que no haya nada raro. Esperemos que se solucione, porque estamos con las manos atadas, porque no podemos avanzar mucho con el trámite de la cooperativa si no tenemos la conciliación con el dueño, porque necesitamos algún reconocimiento de la deuda”, dijo a Ansol Adrián Fernández, uno de los trabajadores de Mi Tío.

Mientras tanto, los empleados siguen trabajando en el local ubicado en Defensa y Estados Unidos, en el barrio porteño de San Telmo, ventas que les permiten mantener retiros para subsistir.

“Estamos permaneciendo como el primer día que entramos. Del trabajo propiamente dicho, bien, porque tenemos la ayuda de los vecinos, el boca en boca está ayudando, para que vengan a darnos una manos, más no sea tomando un café, para solventarnos. Sorprendidos también, porque esto no es algo a lo que estemos acostumbrados. Estamos haciendo un sacrificio enorme, esperando una conciliación para el viernes con el Ministerio de Trabajo y el juez, si es que se presenta”, concluyó Fernández a este medio.