(Ansol).- La metalúrgica bonaerense Bordone cerró sus puertas y cesanteó a 20 trabajadores, 14 de ellos tras concordar retiros voluntarios y los seis restantes despedidos, que actualmente se encuentran acampando en la entrada de la planta, debido a que aún no han percibido las correspondientes indemnizaciones.

Según explicaron desde la compañía las causas del cierre fueron la presión tributaria, el aumento de las tarifas y la baja en las ventas por la apertura de las importaciones, y que este desenlace era de esperarse ya que en los últimos meses venía achicando personal acorde a un plan del fin definitivo de la producción.

Sin embargo, los trabajadores no recibieron ninguna confirmación del plazo en que se les serán abonadas sus indemnizaciones, lo que genera mayor indecisión sobre el alcance y la duración de la medida de fuerza adoptada.

Metalurgia: un sector en declive

Según el último informe realizado por la Asociación de Industriales Metalúrgicos de la República Argentina (Adimra), la producción del sector cayó un 3 por ciento en el primer semestre del año, con una disminución de la utilización de la capacidad instalada (UCI) del 3,2 por ciento, que lo ubica en un magro 54,2 por ciento, casi diez puntos porcentuales menos que la UCI de total de la industria argentina.

Los rubros más afectados son los de producción de bienes de capital, cuya caída productiva fue del 15 por ciento en el interanual de mayo, seguido por el de equipos y aparatos eléctricos, autopartes y equipamiento médico, con una disminución del 6, 4 y 2 por ciento respectivamente, mientras que los beneficiarios son los que realizan productos de metal, la fundición y maquinaria agrícola, con subas del 2, 7 y 15 por ciento.

Una de las mayores causas de la reducción de la actividad productiva del sector fue la apertura al mercado externo, cuyas importaciones en los primeros cinco meses del año fueron por un valor de 9.290 millones de dólares, mientras que las exportaciones, tan solo de 1.062 millones de dólares, con alto impacto en la industria nacional.

Por su parte, el gobierno nacional paralizó la aplicación de normas técnicas para disminuir los productos importados metalúrgicos cuyos bienes beneficiados, concordados con el sector, iban a ser: elementos de seguridad como cables de acero, normas para la conducción de fluidos por tubos con y sin costura, y válvulas.