Las organizaciones de consumidores son un David de soberanía alimentaria contra Goliat

(Ansol).- Las cooperativas de consumo enfrentan dificultades en estructura de costos y en concentración, particularmente, de alimentos. Por ejemplo, el 81 por ciento del supermercadismo está concentrado en tres firmas. Por eso, el lugar que le toca, a pesar de los esfuerzos de empresas sociales como La Obrera, es de una participación muy chica. Sin embargo, tenemos una cantidad de situaciones organizativas como las proveedurías de las mutuales ligadas a las organizaciones sindicales y asociaciones que definen como acción política y como servicio hacia sus asociados intervenir en la compra de alimentos en formato mayorista y distribuirlos.
Aquel 81 por ciento es el gran formador de precios, gracias al acopio y la acumulación. Cuando hay una disparada de las tasas de interés o del dólar, esas cadenas elevan los precios a gusto. No hay nadie que pueda hacerles sombra en cuanto a distribución ni logística.
Lo que creció en los noventa fue la actividad de intermediación, que se hizo también una actividad financiera. Todas estas empresas son líderes en supermercadismo mundial y tienen sus propias herramientas de financiamiento. El nivel de intermediación es tan grande que son fondos de inversión trasnacionales que manejan el comercio de alimentos, con la gravedad que eso tiene: es una pérdida de soberanía.
En ese marco, el cooperativismo de consumo y el mutualismo de consumo son dos pequeños David peleando en la adversidad y promoviendo valores en términos de consumo también. A partir de los años 90, cuando ingresan las grandes cadenas de supermercados en Argentina, se produce esta vía de concentración que hoy estamos viviendo con ferocidad.
Así, hay que lograr que los dirigentes sindicales, mutuales y cooperativos se decidan a intervenir con servicios hacia los asociados que tienen que ver con lograr que un producto esté un veinte por ciento por debajo del supermercado. Las segundas marcas, que muchas veces son mejores, pero son menos visibilizadas en las grandes cadenas.
Es el caso de Agricultores Federados Argentinos, una empresa cooperativa productora de alimentos de primera necesidad de muy buena calidad que también exporta a 15 países.