unicred

La brecha digital, un problema para la educación en cuarentena

Muchas familias tienen un celular para varios estudiantes, por lo que el acceso a las clases remotas se dificulta enormemente. La pandemia agiganta el rol de las escuelas y su anclaje territorial. El caso de la gestión social en Buenos Aires.

13 de abril de 2020, CABA (Ansol).- La brecha digital está directamente vinculada con la posibilidad de educarse de cientos de miles de estudiantes.

Juan Giménez, docente de la comunidad educativa Creciendo Juntos, escuela de gestión social, contó que pedagógicamente, en lo tecnológico se ve una dificultad muy importante para poder seguir dando clases durante la cuarentena.

«Está latente la brecha digital. Se hablaba de que no eran necesarias las notebooks de Conectar Igualdad; sin embargo, se palpa cuán grande es la difrencia de acceso a la tecnología», explicó.

Así, contó el caso de familias que se educan en escuelas de gestión social y estatal, que no tienen más que un celular para cuatro o cinco jóvenes en edad de educación obligatoria.

En Creciendo Juntos utilizan Whatsapp, mail, aulas virtuales y también llamados telefónicos para poder garantizar el derecho a la educación en la localidad de Paso del Rey, en Moreno.

«Los y las docentes nos encontramos ocn la vieja consigna del pedagogo Simón Rodríguez, maestro de Bollívar: Inventamos o erramos», opinó.

Por otra parte, más allá de lo tecnológico, las escuelas de gestión social tienen un enfoque territorial y solidario que hoy también se nota: «En nuestros barrios se ve que cuando la escuela está abierta acompaña las necesidades económicas, laborales, culturales. Somos referencias en nuestros barrios», aseguró Giménez.

Gestión social

La gestión social es una de las formas de la educación en Argentina reconocida en la Ley de Educación Nacional.

Algunas experiencias cooperativas, de fundaciones o de asociaciones civiles que, algunas, surgen a partir de la crisis de 2001; otras, con un recorrido muy grande a partir de necesidades comunitarias.

Muchas de ellasno reciben ningún tipo de subvención estatal, por lo que durante la cuarentena se les está volviendo compleja la remuneración de los y las trabajadoras.

Otras no reciben cuotas porque están ancladas en barrios populares que no podrían pagarlas, por lo que hoy se encuentran en diálogo con el Ministerio de Educación y otros organismos como el Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social para acceder a algún tipo de apoyo financiero.

Permitida su reproducción total y/o parcial, citando debidamente la fuente. 

sa