La autogestión a debate en la Cumbre contra la OMC

Crédito: Dani Minsk para Autogestión para Otra Economía

Crédito: Dani Minsk para Autogestión para Otra Economía

(Ansol).- El miércoles próximo, en el marco del rechazo a la Cumbre de la Organización Mundial del Comercio (OMC), la economía social y popular tendrá un panel de debate en la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA (Santiago del Estero 1029).

Participarán el referente del Movimiento MTE, Juan Grabois, el secretario de Formación de la federación de cooperativas autogestionadas Fedecaba, Andrés Ruggeri, la militante del espacio de inquilinos MOI, Carla Rodríguez, Carmen López del MTL, y Mario Barrios, de la recuperada UST.

La charla rondará en torno al análisis de la situación de la economía de los trabajadores y las trabajadoras y su capacidad o posibilidad de ser una alternativa al capitalismo.

Desorganización

Desde 1995, la Conferencia Ministerial de la OMC aloja un debate de la sociedad civil sobre libre comercio.

Esta vez, el gobierno nacional rechazó más de 60 acreditaciones de expertos de la sociedad civil para participar en la reunión ministerial.

También demoró el ingreso al país de integrantes de redes opuestas al libre comercio, como Isabelle Bourbolon, de la Red Attac y un integrante de la organización brasilera Rebrip (Red Brasilera por la Integración de los Pueblos).

Como algunas organizaciones consideran que la conferencia no es el ámbito donde se puede dar un debate real, levantaron la consigna Fuera OMC.

La semana de acción global Fuera la OMC se iniciará en concordancia con la Marcha de la resistencia de las Madres de la Plaza de Mayo, y coincidirá con la movilización «contra la persecución a la oposición».

Contra el libre comercio

La Cumbre de los Pueblos Fuera OMC, de la que participan organizaciones sociales, políticas, autogestionadas, sindicatos, explicó en un video que le dan la «malvenida» al ente internacional porque este pretende «liberalizar el comercio mundial y eliminar las regulaciones estatales».

Entiende, además, que los países ricos presionaron en la OMC para abrir nuevos mercados para sus productos industriales, mientras que los pobres no consiguen que se cumpla su reclamo de que se termine con los subsidios a la agricultura en los países del Norte.

Actualmente, se suma el comercio electrónico a los intereses que pretende liberalizar la OMC: los servicios, patentes, regulación doméstica, inversiones y comercio electrónico.

Los 164 miembros están obligados a implementar los acuerdos que se acuerdan en las ministeriales; de no cumplirlos, quedan expuestos a demandas y sanciones económicas.
«Si un país se compromete a no regular, a facilitar negocios, los derechos de los pueblos corren serios problemas. No se puede apostar al desarrollo, si se apuesta a reducir la industria. No se puede garantizar la salud, la educación y el acceso a los servicios públicos si el Estado deja libradas estas áreas al funcionamiento del mercado», concluye el material de difusión.
Crédito: Dani Minsk para revista Autogestión para Otra Economía