Los temas del feminismo -hubo conversatorios y paneles- y su cruce con la Economía Social y Solidaria fue uno de las actividades que mayor interés despertó en esta nueva edición del Congreso Nacional de la Economía Social y Solidaria que se desarrolla en la Universidad de Quilmes. Ansol conversó con Veronica Gago y Violeta Borot, sobre las implicancias, desafíos y sobre la necesidad de una nueva relación entre el feminismo y el mundo del trabajo.

18 SEP 2019 Quilmes (Ansol) El panel «Feminismos y economía popular y solidaria» conformado por Verónica Gago (UNSAM-UBA-CONICET); Marisa Fournier (UNGS – Red Universitaria de Género RUGE ); Flora Partenio (UNAJ -Red de Feministas del sur global DAWN); Valeria Mutuberría (IUCOOP) y la Coordinación estuvo a cargo de: Alberta Bottini (UNQ).

«La perspectiva de la economía feminista ha también ha retomada nuevas fuerzas en los últimos años al calor del movimiento feminista que hemos visto en las calles, en las plazas, en las casas, y me parece que es un punto muy importante hablar de economía que suele ser un campo privilegiado para el saber experto, y en general aparece como sinónimo de saber masculino profesionalizado. Entonces uno de los desafíos que pone la «Economía Feminista» es pensar el estatuto epistémico, estatuto político, practica, que tiene la economía practicada y pensada desde lo feminismos», reflexionó en diálogo con Ansol, Veronia Gago, investigadora del Conicet, de la Universidad de Buenos Aires, de la Universidad de San Martín, y especialista en temas de economía feminista.

«Las intersecciones entre feminismo y economía social son fundamentales. Porque por un lado el feminismo piensa desde una especificidad muy concreto acerca del mundo del trabajo, y eso incluye las tareas, labores, y los trabajos históricamente despreciados, no remunerados o mal remunerados, que realizamos las mujeres y las disidencias. Lo que hace el feminismo es ampliar a que le llamamos trabajo, ampliar la categoría de quienes somos las/les/los trabajadores, y eso es un punto clave porque obliga a repensar una noción tan fuerte como la de clase trabajadora. Y lo que significa el trabajo por fuera del patrón del trabajo asalariado, llamado formal. Creo que desde los feminismos y desde otras trayectorias laborales y vitales lo que estamos haciendo es abriendo la noción misma de trabajo. Generando otras visibilidad para tareas comúnmente no recocidas porque sobre ellas pesa la estructura jerárquica patriarcal de invisibilización permanente» expresó Gago, entrevistada por Agencia de Noticias Ansol.

Conversatorio de Género

El conversatorio de Genero -organizado dentro del II Congreso Nacional de la Economía Social y Solidaria- contó con la presentación de muchísimos posters y ponencias que se tomaron para construir los ejes de debate, pero también, según lo explicaron las organizadores, en diálogo con Ansol, se puntualizó en el relato de las experiencias de violencia que están empezando a ser sistematizadas.

«Queremos poner eso en diálogo alrededor de los temas de violencia, alrededor de la cuestión económica, y de las políticas públicas. Es decir, poder debatir conversando sobre los aportes que esas experiencias que han relatado abonan a ejes que ya tenemos previstos», indicó sobre esta actividad, y en diálogo con Ansol, Violeta Boronat Pont, Secretaria de Desarrollo Institucional del Instituto Universitario de la Cooperación.

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ft sa