El desesperado lamento de una tambera santafesina

(Ansol).- “Estoy pensando dejar, arrendar el campo o hacer cultivo. Dediqué toda mi vida a esto», le dijo la tambera de 56 años Ana Pronotti, del departamento de San Justo, a La Nación.
Allí sufren inundaciones y anegamientos desde hace tres años.
Como muchos otros pequeños y medianos productores, busca lugares altos para llevar las vacas que estaban en campos que ya quedaron bajo un metro de agua.
«Es un desastre; sólo queda pedir que recen por todos los que estamos con este problema; es desesperante», resumió desesperada.
La producción de su tambo pasó de 2600 litros diarios a 1000 o 1200, y las bacas ya no tienen comida.El agua continúa bajando desde Santa Fe, y se suma a las lluvias locales, que profundizan los problemas.
Según la Secretaría de Agricultura del Ministerio de Producción de la provincia, en la provincia hay 948.000 hectáreas sembradas afectadas, entre soja, maíz y girasol.