(Ansol).- Los trabajadores de la librería en recuperación Adan BuenosAyres denunciaron que la librería fue vaciada por el exdueño David De Vita mientras hacían guardia para evitarlo. 

Ante la mirada de dos policías sin identificación que decían haber visto la orden judicial de desalojo.

De Vita y los empleados habían conformado una cooperativa a la que este donó la mercadería en forma de compensación de las cargas sociales adeudadas y los años de trabajo en negro a los que sometió a algunos de los trabajadores.

Sin embargo, a sus espaldas, vendió el fondo de comercio y trató de cerrar la librería.

Después de la última reunión que compartieron con De Vita, este golpeó a una de las trabajadoras con la ayuda de su amigo y también empleado Juan Bautista Galarza, cuyo domicilio es ahora también el de la cooperativa. 

En guardia

El 25 de julio, luego de ser alertados de que De Vita vaciaría el local, los trabajadores se acercaron a la librería con su abogado, a quien el exdueño negó cualquier tipo de relación laboral e incluso la formación de la cooperativa.