Denuncian prácticas desleales en Papel Prensa

(Ansol).- «Hay posibilidad de que hayan efectuado discriminación de precios, que es una restricción competitiva prevista en la Ley de Defensa de la Competencia, a la que genéricamente se le llama Ley Antimonopolio», señaló el especialista durante una entrevista para el canal C5N.

Allí, Ferrari repasó el origen de un contundente informe sobre el accionar del Grupo Clarín y La Nación que podría haber violado la ley que -entre otras acciones- establece prohibiciones como acuerdos, discriminación o cartelización de precios y el reparto de mercado para eliminar competidores.

En este sentido, el economista recordó que «a principios de 2010 esta acusación tomó cierta relevancia pública, e incluso creo que la Presidente (Cristina Fernández de Kirchner) hizo algunas menciones, y a mi como docente en Marketing me impulsó a solicitar la intervención de la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia».

La denuncia se basó en la necesidad de determinar si la posible discriminación de precios «afectaba o beneficiaba» a los accionistas mayoritarios, lo que interpretó como una «situación conflictiva» para el funcionamiento de la compañía cuyo 27 por ciento pertenece al Estado Nacional.

«En abril siguiente -relató- tuve acceso a través de la Bolsa de Comercio a un acta de Papel Prensa, que cotiza en la Bolsa, y ahí explícitamente el directorio admite que las operaciones de venta al grupo controlante (Clarín y La Nación), que actúa mancomunadamente a través de un pacto de accionistas, alcanzaban al 70 por ciento, con descuentos de 12, 15 y hasta 20 por ciento», detalló.

En esta línea, el especialista ejemplificó que «si Papel Prensa fuera propiedad exclusiva de Clarín y La Nación y vende a 2.500 pesos (la tonelada de papel), 2.500 pesos es el costo para el Grupo. Si Papel Prensa rebaja 100, deja de ganar 100, pero el Grupo compra más barato y se transfieren 100. Ahí no hay problema, pero el 27 por ciento de Papel Prensa pertenece al Estado y 1 por ciento a accionistas comunes».

Por último, denunció que hay empresas de Clarín y La Nación que compran papel de diario y no editan ninguna publicación y otras que se quejan de las compras de rezagos, material de baja calidad o que se imprime mal.