(ANSOL).- Fundación La Base construyó junto a la cooperativa gráfica WorldColor un plan de inversión anual. «El conocimiento, registro y la creatividad de la coope fueron la clave», dijeron desde la fundación que se dedica a apoyar los procesos de autogestión productiva desde una perspectiva feminista.

Fueron más de diez proyectos entre La Base y la gráfica recuperada WorldColor desde noviembre de 2018 hasta la fecha, lo cual afianzó el escenario para un nuevo y ambicioso plan de inversión. Esta experiencia colectiva, autogestiva y de diálogo permanente rescata el potencial de crecimiento y escala de las cooperativas de trabajo y empresas recuperadas.

La Base, organización de finanzas solidarias que busca fortalecer la autogestión, aprobó en su comité de crédito una línea de inversión para la compra de tinta e insumos regulares para WorldColor, empresa gráfica recuperada de Gran Buenos Aires. El objetivo de la inversión se centró en congelar los costos de materiales claves de su producción y así mejorar los márgenes económicos de la cooperativa.

WorldColor tiene una larga historia de lucha y organización. Ocuparon la fábrica para defender los puestos de trabajo y lograron conformarse como cooperativa con un local y taller en el centro de Pilar y con un taller industrial de gran escala en la zona de Garín, municipio de Escobar, en un espacio de Madygraf, histórica recuperada gráfica de la zona norte del Gran buenos Aires.

Hoy, son 19 trabajadores, y más de la mitad son mujeres. Federico Giorgi, del área de Proyectos Cooperativos de La Base, contó a ANSOL la experiencia. «Los primeros proyectos con WorldColor fueron en 2018. Durante la pandemia, buscaron financiamiento para cuestiones urgentes que no podían afrontar. A la par, anunciaron un plan de impresión gratuita de fotocopias para apoyar la educación de les niñes y las necesidades escolares en medio de la virtualidad. Pasaban una situación muy dura y, sin embargo, pensaban en cómo aportarle a la comunidad«.

Desde ese momento la relación con La Base fue creciendo y, a partir de esa relación, fueron construyendo nuevos proyectos de inversión. «En La Base trabajamos en dupla y vamos rotando para que todes vayamos tejiendo relaciones con les integrantes de cada coope. Fuimos conociéndoles y viendo cómo cada une tenía una sensibilidad especial; algunes pensando en ventas, otres en la administración, otres en la producción. Cada une con ideas y siempre buscando potenciar a la coope. Identificamos que estaban haciendo un gran laburo de registro de datos, lo que nos permitió calcular un ahorro considerable, si lográramos financiar con anticipación parte de la materia prima que usaban regularmente. En ese plan conjunto nos embarcamos», planteó Giorgi.

Las dificultades de las cooperativas para acceder al crédito

El acceso al crédito es muy complejo para cualquier colectivo de la Economía Social, Solidaria, Popular y Feminista, incluso para cooperativas como WorldColor, que tienen una sólida economía y organización interna. La lógica crediticia de los bancos y las finanzas tradicionales les deja afuera o financia a tasas usureras. Las cooperativas de trabajo necesitan financiamiento que les permita seguir apostando a la producción, al sostenimiento y la generación de puestos de trabajo y al crecimiento. Para La Base, un financiamiento planificado y a tiempo permite no sólo recuperar el capital financiado sino impactar realmente en la economía de la cooperativa.

En un balance sobre el vínculo con la cooperativa y los años de trabajo conjunto, Giorgi concluyó: «El trabajo de WorldColor de registro es impecable, lo mismo que su experiencia en el rubro y las estrategias que se dan, pensando en elles pero también en la comunidad. Esto permite que en un marco recesivo y de enorme inestabilidad para los sectores más vulnerables, se sorteen obstáculos de todo tipo y se puedan desarrollar proyectos ambiciosos como el que hicimos. En concreto y en este caso que contamos, la coope tiene con La Base para este año, un financiamiento permanente de una parte de su materia prima».

En un contexto de crisis económica como el que atraviesa el país, imaginar y construir proyectos con las cooperativas a mediano plazo es desafiar la lógica financiera imperante. Apostar al sector y al trabajo colectivo es continuar resistiendo el embate de este neoliberalismo despiadado.