(Ansol).- En el taller Las huertas familiares como herramienta contra la violencia de género que tuvo lugar el martes 7 en el Centro Deportivo de Alto Rendimiento Dr. Carlos Pellegrini (Cedar) de la provincia de Tucumán, participaron más 150 personas.

Apuntó al empoderamiento económico y de autoestima de las mujeres víctimas de violencia de género por lo que en la jornada se trabajó sobre la reconstrucción de redes de confianza y apoyo mutuo, y la restitución de capacidades laborales propias.

La capacitación fue el primer encuentro logrado desde la firma del convenio realizada el 3 de junio entre Consejo Nacional de las Mujeres (CNM) y el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) para empoderar a las mujeres a cargo de huertas familiares y a técnicos del programa Pro Huerta, haciendo eje en la superación de la violencia económica.

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En la misma línea, a principios de julio el CNM capacitó en abordaje integral de la violencia y ruta crítica al personal de la Dirección Nacional de Abordaje Crítico del Ministerio de Desarrollo Social para brindar herramientas de contención, asesoramiento a las mujeres en situaciones de violencia en el marco de la Ley N° 26.485.

«Se denomina ruta crítica a las decisiones y acciones que deben tomar las mujeres que son víctimas de violencia y a las respuestas que encuentra en la sociedad en la búsqueda de soluciones. La ruta crítica compone un panorama complejo y puede convertirse en un factor de revictimización e inhibidor para las mujeres que no cuentan con una red de contención y asesoramiento que las ayude a superarla. Romper el silencio, pedir ayuda, es el primer paso para la solución», remarcaron al respecto desde Desarrollo Social.